Si hay una visita obligada en Puerto Vallarta, esta es a su Malecón. Porque ya sea de día o de noche, en temporada alta o baja, en grupo, pareja o en solitario, si hay un lugar en el que se puede, y se debe, vivir el latido de esta ciudad con alma de pueblo es el Malecón.
A lo largo de sus 1500 metros de longitud, disfrutarás del Pacífico y de las palmeras y de numerosas tiendas, bares y restaurantes; descubrirás la cultura Huichol / Wixárika; te sorprenderás con las figuras de arena que resisten la fuerza de los elementos día tras día.
También podrás conversar con los artistas y artesanos que trabajan pausadamente o, simplemente; te dejarás llevar por las historias y leyendas inspiradas en las llamativas esculturas – más de 10 – que adornan el Paseo Díaz Ordaz y que son uno de los principales atractivos de este boulevard.
Visita imprescindible: El Malecón de las Esculturas

Aunque en la actualidad sea más conocido como el Malecón de las Esculturas, lo cierto es que en los años 30, cuando se inauguró, sus 11 manzanas – o cuadras – no eran peatonales y el nombre con el que se bautizó fue el de Paseo de la Revolución.
Todo esto cambió en la década de los 70, cuando pasó a denominarse Paseo Díaz Ordaz tras una ambiciosa remodelación.
La mayor parte del malecón se dejó en exclusiva para el disfrute de los peatones. Se reubicaron las esculturas que ya existían y se incorporaron nuevas. Se habilitaron zonas de playa y se sumaron más palmeras, para que la sombra hiciera más agradable el caminar por esta zona muy próxima al centro de Puerto Vallarta.
Dónde comenzar la ruta por el Malecón
Oficialmente, el recorrido comienza en el Hotel Rosita, el más tradicional de este destino costero, y termina en el Río Cuale, lo que permite cruzar también la Zona Romántica y llegar hasta la Playa de Los Muertos, donde pudimos contemplar un precioso atardecer. Un punto y final perfecto para el recorrido.
El suelo y algunas piezas del mobiliario urbano están decorados con elaborados motivos Huicholes, aportación del artista Fidencio Benítez, quien de esta manera quiso rendir homenaje a este pueblo que siempre ha luchado por conservar sus ancestrales tradiciones

Puerto Vallarta y el Malecón de las Esculturas
Cuando empecé a documentarme sobre Puerto Vallarta, me resultó muy turiscurioso que, en un destino playero, destacara como una de sus principales atracciones admirar las numerosas esculturas de reconocidos artistas mexicanos y extranjeros que decoran la ciudad y su Malecón,.
Así que tenía muchas ganas de realizar el recorrido y, afortunadamente, fue una de las primeras cosas que hicimos en nuestro viaje a México.
En total, hay más de 40 obras artísticas distribuidas por toda Puerto Vallarta, pero estas son algunas de las que pudimos ver durante nuestro paseo por el Malecón que, lamentablemente, no pudimos caminar completo:
Los milenios (Mathis Lidice)
Si haces la ruta de norte a sur, esta obra en espiral te dará la bienvenida. Se inauguró en octubre de 2001 y representa el paso del tiempo.
Entre los meses de noviembre y abril, este es también el punto de partida de un tour gratuito que organiza la Galería Pacífico una vez a la semana.
Origen y destino (Pedro Tello)

Es un trabajo aún no ha acabado, en el que sólo pueden verse 5 de las 8 esculturas que conforman el proyecto escultórico. Aun así, fue una de las que más me gustó.
Todas las piezas tienen que ver con la humanidad: el bote es la búsqueda de nuevos horizontes, la quimera es la aparición de las máquinas, el reloj de arena simboliza la historia y el paso del tiempo, la ballena es la llegada al nuevo milenio y el obelisco representa las obras de la humanidad.
La nostalgia (Ramiz Barquet)

Esta escultura está inspirada en una historia real, la del artista mexicano Ramiz Barquet, quien creó la obra para simbolizar su amor por su esposa Nelly Barquet, una relación que durante años pareció imposible, pero que tuvo final feliz.
Fue la primera pieza que se colocó en el Paseo Díaz Ordaz, en 1984.
El sutil comepiedras (Jonás Gutiérrez)

Aunque no lo parezca, esta curiosa obra intenta transportarnos a la niñez, o por lo menos a la de su creador, quien contó que durante su infancia disfrutaba jugando con el lodo. Seguro que no te deja indiferente.
El unicornio de la buena fortuna (Aníbal Riebeling)

Es una de las piezas más recientes de la colección, ya que no se instaló en el Malecón hasta enero de 2011. Este unicornio de 3 metros de altura me pareció muy simpático.
Tritón y Sirena (Carlos Espino)
Está entre las esculturas “veteranas”, ya que se erige en el Malecón desde el año 1990. También se le conoce con otros nombres, como Neptuno y Nereida, Poseidón y Nereida, o Tritón y Nereida, pero ninguno de ellos es correcto.
Según pude leer en la web puertovallarta.net “Poseidón, a pesar de que también llevaba un tridente, no era un tritón, mientras que Tritón era considerado mitad hombre y mitad pez. Para aquellos que puedan pensar que es Neptuno, esto no funciona pues Nereida es parte de la mitología griega y Neptuno de la mitología romana.” Fin del debate
La rotonda del mar (Alejandro Colunga)

Es una de las esculturas que más gusta a los visitantes para hacerse una fotografía – aunque nosotros elegimos otra como favorita –.
El pintor y escultor, cuyos trabajos pueden verse también en diversas locaciones de Guadalajara (Jalisco), diseñó 8 sillas que son una mezcla entre seres humanos, animales y objetos.
Eso sí, cuando calienta el sol, no debe ser muy recomendable sentarse en una de ellas.
En busca de la razón (Sergio Bustamante)

Esta fue la elegida por parte del grupo para una simpática, aunque nada original sesión fotográfica, ya que después supimos que son muchos los paseantes que se suben a la escalera para captar el momento (¡¿o para encontrar la razón?!)
En nuestra visita al pueblo de Tlaquepaque, volvimos a ver otra escultura de este artista de Culiacán, también muy curiosa.
Otras esculturas del Malecón
Como tuvimos que desviarnos para visitar otros rincones de Puerto Vallarta, no pudimos seguir el recorrido que nos llevaría a ver otras esculturas emblemáticas de este Malecón como La fuente de la amistad, del artista estadounidense James «Bud» Bottoms.
O El niño sobre el caballo de mar, que se ha convertido, junto con la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, en uno de los símbolos de esta ciudad del estado de Jalisco.
El Caballito de Mar
Esta obra, también conocida simplemente como El caballito de mar, está ubicada cerca del Viejo Faro y en realidad es una réplica de la escultura original creada por Rafael Zamarripa en 1960, cuando tan sólo tenía 18 años de edad y recién había ganado el Premio Nacional de Escultura.
La primera obra se hallaba en las Pilitas (Playa Los Muertos), pero una fuerte tormenta la arrastró mar adentro.
En 1976, se encargó al artista una réplica más grande para instalarla en el Malecón y una vez ubicada en su actual emplazamiento, la escultura original se recuperó y se volvió a colocar en su sitio.
Lo que significa que en Puerto Vallarta podemos ver El niño sobre el caballo de mar por duplicado.

Como mencioné, en esta bonita ciudad hay más de 40 esculturas y estatuas, así que si deseas verlas todas, puedes obtener información en la página web de Puerto Vallarta.
Encontrarás fotografías y un mapa detallado con los lugares en los que se encuentran.
Tips para turistas curiosos:
Aunque es muy fácil obtener información y hacer el paseo por el malecón por tu cuenta, te recomendaría que aprovecharas la oportunidad de hacer el recorrido con un guía, ya que seguro compartirá muchas anécdotas curiosas y hasta alguna leyenda.

Todos los martes en la mañana (9:30 am), entre noviembre y abril, sale un tour gratuito desde la escultura de Los milenios. Estos art walks ofrecen incluso la oportunidad de conocer a algunos de los artistas.
Si deseas ampliar los detalles, puedes contactar con la galería que lo organiza. El propietario es norteamericano, pero no indica si el paseo es en español, inglés o ambos idiomas.
Si esta oferta cultura te sabe a poco, y además quieres invertir en piezas artísticas originales, hay otra caminata de 4 horas (6:00 pm) que se realiza los días miércoles, entre octubre y mayo.
Arte en el centro histórico de Puerto Vallarta
El recorrido del Camino del Arte (Historic Center Art Walk) incluye visitas a 10 galerías que exponen desde obras contemporáneas inspiradas en la cultura Huichol, hasta joyería antigua y piezas elaboradas en plata, cerámica o arcilla.
Y si deseas compartir con tus familiares y amigos tu experiencia, casi que en directo, sólo tienes que aprovechar el wifi gratuito del Malecón de Puerto Vallarta.
¡Esperamos pronto tus fotos desde esta bonita ciudad del Pacífico mexicano!
Dónde alojarse en Puerto Vallarta
Durante nuestra estancia en Puerto Vallarta nos alojamos en el hotel Vamar Vallarta Marina & Beach Resort. Está ubicado en la zona de la Marina y para ir al Malecón puedes optar por el transporte público o un taxi.
Si has alquilado vehículo, es recomendable informarse antes sobre las posibilidades de aparcamiento, sobretodo en temporada alta, porque alrededor del Paseo Díaz Ordaz las calles son estrechas.

Si prefieres alojarte en el centro de la ciudad, encontrarás unos cuantos establecimientos con encanto, ubicados muy cerca de la playa y de los principales atractivos de la ciudad, como el Malecón de las Esculturas.
Siempre que viajo me gusta fotografiar todas las esculturas que me voy encontrando, así que este es mi sitio. Me han gustado las fotos y el post, un lugar más para mi lista de viajes. Saludos
Hola Belén. Qué bueno saber que no soy la única que hace este tipo de fotografías. Estoy segura que disfrutarías mucho este paseo de Puerto Vallarta. Muchas gracias por tus palabras. Saludos viajeros.
Hola Mauxi
No sé por qué, pero me transportaste hasta Puerto Vallarta y me vi en medio de esos paseos y las esculturas.
Una mezcla de relato/fotos muy bien trabajada.
Un abrazo
Bo
Qué ilusion me ha hecho leer tus palabras porque ese era uno de los objetivos, intentar transportar a las personas a un lugar que me gustó mucho y en el que me lo pasé tan bien. Gracias por tu comentario! Otro abrazo para ti Bo.
Qué curioso que hayan convertido el paseo marítimo en todo un espacio expositivo. Es una gran manera de acercar el arte al pueblo.
¡Un saludo! 🙂
Muy curioso y muy interesante. Por detalles como este es que me gustó tanto Puerto Vallarta y entendí porqué era el lugar favorito de vacaciones de varios de mis amigos mexicanos.
Me ha gustado mucho tu post. Me ha venido genial para escapar a ese paraiso despues de la «vuelta al cole»
Muchas gracias por tus palabras. Me alegra saber que te ha ayudado para evadirte e imaginarte de nuevo de vacaciones. Que tengas un bonito día 🙂
Arte al ladito de mar. Que bonito poderlo disfrutar con la brisa marina!
Por eso digo que es un lugar perfecto para irse de vacaciones: mar, arte y buena gastronomía. 🙂
Me encantan las fotos!, y el lugar… ya lo tengo en la lista de lugares a visitar urgentemente!.
Gracias por la info!
Saludos
Antonio
Muchísimas gracias por tus palabras. Yo quedé gratamente sorprendida con Puerto Vallarta y me hubiera gustado dedicarle más días. Es un destino de México que no dudo en recomendar, así que espero que puedas ir pronto! 🙂